POUET

JUAN MARCO MARCO
Localización: València
Arquitectos colaboradores: Paula Lacomba, Sheila Pérez, Ana Vila y Guillermo Gómez
Constructor: “pouet U.T.E.”
Fotografía: Diego Opazo

La propuesta se fundamenta en la conservación y rehabilitación integral de una casa construida en 1928 en el centro histórico de València, para transformarla y alojar un nuevo programa de vivienda.

Con una actitud positiva, se derriba lo mínimo, reparando y reciclando, para añadir, trasformar, y reutilizar, acomodando ese nuevo programa con una estrategia basada en ciertas acciones, sin retórica, que convergen en una serie de actos por parte de los habitantes. Los nuevos elementos, tanto interiores como exteriores, que solicitan las nuevas necesidades, se instalan sin imponerse, con la máxima ligereza posible, acompañando a cuanto se ha podido mantener del viejo edificio, y atendiendo a las condiciones ambientales de Valencia.

El edificio original organizaba una vivienda por planta. Con el nuevo programa, que agrupa varias plantas, surge la necesidad de integrar la escalera en estos espacios domésticos, y alojar un elevador de manera tranquila. Todo esto se resuelve con una intervención estructural que aligera, abre, dinamiza los muros de la escalera y conecta ésta con una triple altura, aprovechando un pequeño patio preexistente, de dimensiones mínimas en planta, pero que, vinculado a la terraza superior, aporta una gran luminosidad.

Este espacio intermedio se convierte en un dispositivo climático.

La energía se ha convertido en un instrumento más del proyecto contemporáneo, pero rehabilitar no es solo un tema energético, o técnico…es básicamente recuperar una condición perdida, en este caso, hacer revivir esta estructura, actuando de manera continua, relacionando los tiempos, poniendo en acción todo aquello, muy atentos a las condiciones ambientales.

Aquella estructura adquiere otro significado.

La organización del programa doméstico se realiza con la máxima ligereza posible, incluso, a veces, introduciendo la ambigüedad necesaria para que el habitante, con criterios más vitales, introduzca las marcas de habitabilidad, y genere otras posibilidades.

La instalación de la carpintería interior, con tableros industrializados de abedul laminado (en ocasiones revestido de tablero compacto blanco) adquiere una presencia provisional, como algo inacabado, y se aloja en las irregularidades geométricas del edificio, acompaña.

Texto del autor