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CHAPEAU en calle Hernán Cortés 5 de Valencia

PREMIO

 

RAMÓN ESTEVE CAMBRA
Situación: Calle Hernán Cortés 5, Valencia
Técnicos colaboradores: Anna Boscà (arquitecta), Estefanía Pérez (arquitecta), Víctor Ruiz (arquitecto), Juan A. Ferrero, Silvia Martínez, Tudi Soriano, Isabel Meyer, Patricia Campos, Natalia Fonseca, Emilio Pérez (arquitecto técnico) y Sergio de Andrés (ingeniero)

Este proyecto responde al encargo de diseñar un espacio de tienda para la exposición y venta de prendas de diversas marcas de lujo.

La particularidad de albergar prendas de distintas firmas que poseen una fuerte identidad, a la vez que la propia configuración espacial del local, han sido condiciones definitorias del proyecto.

En este espacio, el lenguaje narrativo que predomina es el de la geometría pura. El juego geométrico, desarrollado con coherencia, permite introducir una diversidad de elementos y espacios de manera ordenada sin perder entidad.

Así pues, la geometría se representa mediante tres categorías elementales que enlazan todas las escalas del diseño, desde la arquitectura hasta el detalle del mobiliario.

El primer lugar de la escala arquitectónica, lo ocupan conjuntos de prismas materializados mediante distintos elementos, como las cajas de espejos reflectantes en la parte central, correspondientes a los probadores, los volúmenes de luz blanca en el perímetro, o las grandes cajas verticales de espejo negro en el espacio de mayor altura.

La siguiente categoría corresponde a los planos que configuran los techos y el lucernario. Una sucesión de planos inclinados siguiendo una trayectoria longitudinal permite albergar las instalaciones sin perder altura. Estos planos conducen hasta el final de su recorrido, donde se transforman en las hojas de vidrio sesgadas que cierran el lucernario.

Finalmente, la categoría más elemental del diseño, con la que se llega al detalle, corresponde a la línea. Ésta define las finas piezas de colgadores y mobiliario, donde penden las prendas de ropa. Tal elemento se lee también en las rasgaduras que invaden todo el espacio, rompiendo planos y generando aristas.

Este lenguaje formal que lo inunda todo, definido por las geometrías básicas de sólido, plano y línea, se materializa con vidrios, espejos, piedras y metales en colores blancos, grises y negros para lograr la atmósfera idónea donde exhibir un producto de la mayor calidad, en un atractivo juego de reflejos, sombras y luces.

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